Los mares y océanos conectan el mundo. A través de los océanos se han descubierto y colonizado nuevos territorios, sobre todo a partir de los siglos XV y XVI, con el inicio de los viajes de exploración, cuando los imperios europeos establecieron colonias en diferentes partes del mundo para explotar los recursos naturales de los nuevos territorios y establecer mercados para sus productos manufacturados. Es el caso de Ciudad del Cabo. La llegada del navegante neerlandés Jan van Riebeeck a las costas del sur del continente africano, el 6 de abril de 1652, significó el establecimiento del primer asentamiento europeo en el África subsahariana. Situada en una gran bahía, Ciudad del Cabo se desarrolló originalmente como un punto de abastecimiento para los barcos de la Compañía Neerlandesa de las Indias Orientales que viajaban a África Oriental, India y Asia, más de doscientos años antes de la apertura del canal de Suez, pero rápidamente se convirtió en el centro económico y cultural de la región.
El 80% del comercio mundial se realitza por mar
— Forum Económico Mundial
Sydney fue fundada en una bahía en 1788 por Arthur Phillip, almirante de la Primera Flota de Gran Bretaña, y fue el asentamiento de la primera colonia británica en el continente. Los primeros colonos eran mayoritariamente condenados, pero con el tiempo se establecieron inmigrantes libres, y la colonia prosperó. En el siglo XIX y durante la primera mitad del siglo XX, Sydney experimentó una gran expansión y desarrollo, convirtiéndose en un importante centro comercial e industrial. Durante esa época se construyeron numerosos edificios públicos y monumentos, como el puente del puerto, inaugurado en 1932 y considerado una obra maestra de la arquitectura.
Situada en el cruce del Caribe, entre Centroamérica y Sudamérica, Miami goza de una situación geográfica privilegiada, y es el epicentro del comercio internacional entre las diferentes Américas. El puerto es reconocido como la capital del mundo de los cruceros, siendo una de las puertas de entrada de mercancías más importantes de todo el continente. Gracias a su frenética actividad, el Puerto de Miami genera 98.000 puestos de trabajo.