Millones de personas en todo el mundo no disponen de acceso a servicios de agua potable ni a instalaciones de saneamiento gestionadas de forma segura, principalmente en áreas rurales empobrecidas o en zonas urbanas informales de África y Asia Occidental, donde las infraestructuras son limitadas y donde no existe ni siquiera una instalación básica destinada a lavarse las manos con agua y jabón. También en Europa y Norteamérica, hasta 57 millones de personas no disponen de agua potable canalizada en sus hogares, y 21 millones ni siquiera tienen acceso a los servicios básicos de saneamiento..
La falta de acceso a agua potable tiene un impacto sobre la conservación del medio ambiente. Cuando las personas no tienen acceso, recurren a fuentes naturales, lo que provoca la sobreexplotación y la degradación de ecosistemas frágiles.
Debido a la sobreexplotación, la contaminación y los efectos del cambio climático, casi el 40% de la población tiene enormes dificultades para acceder a los servicios más elementales relacionados con el agua, circunstancia que, para 2025, afectará a un 66% de la población mundial.
“ 3 de cada 10 personas no tienen agua potable en el hogar,
4 de cada 10 no disponen de una instalación básica destinada a lavarse las manos,
i 6 de cada 10 no tienen acceso a instalaciones de saneamiento seguras
— Organización Mundial de la Salud
